
Me siento sola,
como entre las calles y paredes de la ciudad;
en la lejanía y el ruido,
los gritos, las palabras
y miradas secas de la gente.
He corrido a esconderme
buscando donde cobijarme
y te recuerdo...
Quisiera olvidarte, no recordarte
y pensar que nunca exististe,
pero busco en tu mirada otros horizontes
y me pierdo en un mundo de fantasía.
A veces pienso que te he creado para mí,
pero entonces te encuentro incierto
porque me buscas y te marchas,
te marchas y te busco
pero porque te busco, ya no regresas.
De pronto el frío me abraza completamente
y me encuentro en la realidad de nuevo,
y no hay razón para vivir
ni motivo para soñar.
Pero huyo de mis pensamientos, me desespero
y llena de rabia y coraje, grito:
¿Dónde demonios, quedó la amistad?...
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